Por una relación afirmativa con la improvisación III: Eleonora Cróquer Pedrón (México), Rodrigo Ríos Zunino (Valparaíso) y Susana Romo (Guadalajara)

Ricardo Lomnitz

Retomando el exergo del coloquio preguntando por el significado de la enigmática frase de Benjamin acerca de “dar golpes con la mano izquierda”, Eleonora Cróquer desarrolla los vínculos entre la improvisación y la ex-critura, comprendida como aquella literatura abierta al afuera, que supone una puesta en juego de la existencia. Cróquer sugiere que dar golpes con la mano izquierda supone una apuesta por aquello que no es plenamente gobernable, ni previsible. 

Rodrigo Ríos aborda la importancia de la improvisación –comprendida, entre otras cosas, como un enredarse– para las radios comunitarias. Expone y reflexiona sobre una serie de experiencias radiales en las que la improvisación muestra su capacidad para crear comunidad, unir tiempos y lugares disímiles, y cuestionar los límites entre lo íntimo y lo público.

Susana Romo expone el trabajo que ha desarrollado con A la Deriva Teatro, compañía que ha explorado a profundidad la improvisación como herramienta para comunicarse, estimular y generar comunidad con infancias. La improvisación se revela así como una práctica esencial en la niñez, al tiempo que como una herramienta para generar puentes entre adultos y niños. 

Por una relación afirmativa con la improvisación II: Sergio Villalobos-Ruminott (Ann Arbour) y Ruud Kaulingfreks (Rotterdam)

Ricardo Lomnitz

¿Cómo reconciliar la burocracia y la voluntad democrática? Ruud Kaulinfreks dice que la improvisación puede ofrecernos orientación. Resalta la importancia de la improvisación para la gestión, en tanto práctica adaptativa, creadora y de naturaleza colaborativa. De manera particular, desarrolla una serie de paralelismos entre el jazz –y la práctica improvisatoria que le corresponde– y la gestión de organizaciones, en tanto …

Por una relación afirmativa con la improvisación I: Ricardo Lomnitz y Benjamín Mayer

Ricardo Lomnitz

Benjamín Mayer Foulkes y Ricardo Lomnitz Soto, organizadores del coloquio «Máquina productora de silencio: La improvisación en y más allá de la música y las artes«, dirigen unas palabras de bienvenida.

Ricardo Lomnitz recorre las características de los estudios críticos de la improvisación y de algunos de los trabajos más importantes en este campo en lengua castellana. Subraya el potencial para incitar discusiones urgentes entre distintas disciplinas, situándose desde una lógica centrada en los procesos, las relaciones y la producción de diferencias, remarcando que los estudios críticos de la improvisación llaman a pensar “desde la improvisación”, más que “sobre la improvisación”.

Benjamín Mayer resalta la importancia que tiene revalorizar la improvisación en aquellos territorios marcados por la herencia colonial, donde esta noción se ha usado con un sentido peyorativo. Esto supone subvertir lógicas que han resultado constitutivas de ciertas subjetividades subalternas, develando que se trata de una práctica ubicua, de importancia capital para la vida toda.

Máquina productora de silencio. La improvisación en y más allá de la música y las artes

Ricardo Lomnitz

Una máquina. Una máquina que produce. Silencio. Ruidosa máquina. Productora. Una máquina que genera, ruidosamente, silencio. Llamamos a instalar los Estudios de la Improvisación en los territorios de la ñ. Ahí donde se denosta a los improvisados, afirmar el carácter originario y fundante de la improvisación —que también damos en llamar extemporización—, entendida como la capacidad para negociar con gracia la diferencia entre el conocimiento y sus límites, los planes y la vida. Tal como hace falta en todos los campos de la cultura, la sociedad, la política, la ciencia, la técnica y el medio ambiente. Sin excepción.

La improvisación en proceso – Bennett Hogg

Ricardo Lomnitz

La improvisación y el proceso de justicia social son prácticas culturales cuyos puntos de arribo, una vez iniciado cualquier proceso individual, permanecen desconocidos. En efecto, si el resultado de una iniciativa de justicia social estuviera determinada de manera previa al desarrollo de su proceso, se pensaría que su juicio fue sesgado, no habiendo seguido un debido proceso.1 En este artículo, planteo que la improvisación musical y la justicia social comparten varias prácticas y preocupaciones, algunas de forma más explícita que otras. De manera particular, exploraré las maneras en que los procesos de improvisación y de justicia social pueden interrogar y desafiar las respectivas ontologías de la “obra musical” y de la “ley”, y a partir de este análisis, caracterizaré ambas como “mediaciones” más que como aplicaciones de categorías a priori. Para complementar lo anterior, también examinaré algunas condiciones específicas de la escucha, así como las maneras en que la escucha podría ser configurada de modos distintos, en la medida en que dicha examinación tiene efectos sobre nuestro entendimiento de la escucha tanto en la práctica musical como en el de la justicia social.

Sujeto, objeto, improvisación: John Cage, Pauline Oliveros y la filosofía oriental en la música – Tracy McMullen

Ricardo Lomnitz

La música plantea un problema para la tradición intelectual de occidente, que privilegia la razón y la mente por encima del cuerpo.  Dada su conexión con la emoción, el cuerpo y lo femenino, la música ha estado bajo sospecha desde Platón, y aquell_s que defienden a la música como un “arte serio” muchas veces se han esforzado por asociarla con su “costado mental”, aspecto privilegiado de la separación mente-cuerpo occidental. Por ejemplo, en el periodo moderno, el creciente énfasis en el análisis textual de la “obra” establece la partitura del compositor como el sitio de la música,  marginando sus aspectos corporales, incluyendo a sus corpóreos y contingentes intérpretes (Taruskin; Goehr). Y la improvisación –que privilegia al ejecutante subjetivo y corpóreo y a la interpretación por encima de  las partituras objetivadas y reificadas—ha sido  paulatinamente suprimida de la tradición musical de occidente (Bailey; Nettle y Russell). Este ensayo indaga en torno a John Cage y Pauline Oliveros en este contexto, demostrando cómo  la radicalidad de estos artistas ha sido (in)comprendida a partir de concepciones ilustradas sobre el individuo y de una  dicotomía sujeto/objeto que no puede explicar adecuadamente la intersubjetividad de la improvisación.

Por una relación afirmativa con la improvisación – Ricardo Lomnitz Soto (2024)

Ricardo Lomnitz

Me ven delante de ustedes con un bonche de hojas, que seguramente leeré. Probablemente supondrán –he de decir, de manera correcta– que hablaré sobre improvisación. Pero… ¿no se presenta ahí algo chocante? ¿No es acaso una infidelidad para con la improvisación, comprendida ésta como una práctica vinculada con lo incalculable, lo vivo y el “presente”, el recurrir a un medio estático para abordarla? Ahora volteo a verl_s a ustedes, l_s escucho, y algo le pasa a este texto…